Preparamos tu ático para su comercialización en el mercado inmobiliario, sacando el máximo partido posible para que luzca en todo su esplendor, a fin de hacer tu ático más atractivo para un mayor número de compradores potenciales, y así incrementar las posibilidades de venderlo en un menor tiempo y con un mayor beneficio para su propietario.

El homestaging busca convertir tu propiedad en un producto de marketing;, conseguir que tu dormitorio sea una habitación de un hotel de lujo a los ojos del potencial comprador, transformar tu terraza en un velador, tu salón un restaurante y tu baño un spa.

¿Cómo lo hacemos?
Despersonalizando todas las estancias, lo cual va a permitir que le potencial comprador pueda imaginarse como su próximo propietario.
Amueblando, decorando y creando escenas emocionales en toda la vivienda, para que los futuros habitantes de al mismas puedan imaginarse experimentándolas.

Uno de los puntos más importantes consiste en la ordenación y colocación de los elementos, al igual que la elección de los mismos. Tenemos que mostrar las posibilidades que puede ofrecer la estancia y no la estancia tal y como está.

La iluminación de la estancia es otro de esos factores fundamentales para un buen homestaging. Si conseguimos una buena iluminación captaremos de manera irremediable la atención del posible comprador pero cuidado, una sobre exposición podría causar el efecto contrario.

El orden, la limpieza, las sensaciones a transmitir... son muchos los factores que intervienen en un buen homestaging. Un buen truco es pensar cómo te gustaría que apareciera tu casa en una revista de moda. Elimina todos los objetos o muebles que consideres que no son necesarios.

En definitiva, con el homestaging pretendemos facilitar la conexión emocional que debe darse entre el comprador y su futuro hogar.
Esta mágica conexión nos permitirá rentabilizar al máximo la venta de tu ático.